Libres por Gracia y no por apariencias

¿Crees que no tienes solución y vas triste por el mundo, desahuciado y con el cuerpo terrible? Nadie te comprende, cuando buscas un consejo no encuentra palabras que puedan tranquilizar tus ánimos de espíritu… seguro es tu caso, pero te digo que somos libres de nuestros males no por obras, ideas, religión, ropa eclesiástica ni alguna otra estupidez social más: ¡eres libre por la gracia del Dios Vivo en Jesucristo! ¿Quieres saber más de esto?

No te intimides. Dios tiene los brazos abiertos para todos. Dios quiere liberar tu alma y tu cuerpo. Dios no viene a condenarte, a decirte que tu ropa es indecente, que tu apariencia es de un fugitivo de la ley, no te desprecia por ninguna falta que hayas cometido si te sientes arrepentido. La palabra dice “si escucharéis mi voz”. ¿Podemos escuchar la voz de Dios?

Puede que algunas veces Dios te hable ¿curioso? Realidad. Dios te puede hablar con su voz de autoridad. El camino a esto es empezar a escuchar la voz de Dios transmitida por hombres inspirados por él que escribieron la Biblia que hoy conocemos. Los diferentes grupos religiosos han revoloteado por diferentes razones las verdades bíblicas, con esto han logrado que la esencia por la que existe se vea difuminada, borrosa e inentendible.

Pero, Dios es amoroso hasta tal punto que hoy se va revelar a tu vida. Jesucristo va entrar en tu vida en este momento que estás leyendo este artículo. Si crees, si tienes la suficiente firmeza para creer que él te ama, el amor de Dios será revelado a ti y todos tus pecados te serán perdonados.

No te aflijas por tus discapacidades físicas, tus incapacidades morales y los actos que hayas cometido. No pienses que lo tuyo no tiene solución, eso es solo un círculo vicioso del subconsciente que nos autolimita… recibamos, recibamos al salvador Jesucristo en nuestro corazón, porque somos salvos por gracia, por regalo del Dios todopoderoso y no por las apariencias.

El Profeta escribió: “… Por la llaga de sus espaldas nosotros fuimos curados…”

Jesucristo ha venido a salvarte, confía en él… y solamente en él, no tomes en cuenta fachadas de apariencia. Dios te ama.